Me acaban de faltar el respeto, y mucho, no poco. Me han faltado el respeto una vez más, una de tantas. Y, ¿sabéis?, me siento tan vacía, tan miserable, tan arrastrada, tan indigna, tan fea, tan gorda, tan sucia, tan mierda, que ni siquiera puedo llorar, es como si mi mente se paralizase, en un intento de administrar el dolor, si viene todo de golpe, creo que podría matarme, matar a mi físico, porqué mi ser, en estos momentos, ya está muerto.
Sinceramente, no consigo entenderlo. Por más vueltas y vueltas que le Registrarse en twitter en mi cabeza, no consigo comprender porque a según que personas, les cuesta tanto respetar a otras.
Son pequeñas cosas, prácticamente insignificantes, pero, cuándo las juntas todas, descubres que tu autoestima, simplemente, se arrastra. Ese tono de voz, esas palabras dichas en el momento Fuente.
Supongo que la falta de respeto siempre, o casi siempre, va unida a hacerte sentir culpable, pero, ¿es eso realmente necesario?, ¿no podemos asumir que siempre, cuándo existe un conflicto, acostumbra a haber pecado por ambas partes?, ¿tan difícil es madurar, hablar las cosas, discutirlas si es necesario?, prefiero gritar, racionalizar y perdonar, a quedarme en este estado de catarsis del que tanto me cuesta salir.
No consigo entenderlo, no puedo entender qué tipo de oculto goce o disfrute puede existir en torturar a una persona. La única pregunta que afluye a mi mente es, ¿qué más quiere de mí?, me ha robado el amor, la dignidad, el dinero, los coches, la mente, el raciocinio, la cordura. Qué más puede querer?. Alguien me ha dicho, “quiere tu alma”, pero, antes que dársela, se la vendo al Diablo.
Telegram plus 